COMPAÑÍA:
Fundado en Oslo, Noruega, en 1964. El Odín Teatret se traslada a Holstebro, Dinamarca, en 1966 convirtiéndose en Nordisk Teatre laboratorium – Odín Teatret. En la actualidad sus 40 miembros provienen de once países de 4 continentes diferentes.
Las actividades del Laboratorio incluyen: producciones del Odín presentadas tanto en su sede como en giras; ‘trueques’ con diferentes ambientes de Holstebro y otras ciudades; organización de encuentros de grupos de teatro; hospitalidad de grupos de teatro y danza; el Festival anual Odín; publicación de revistas y libros; producción de films y videos didácticos; investigación sobre antropología teatral durante las sesiones de la ISTA (International School of Theatre Antropólogo); la Universidad del Teatro Eurasiano; producciones de espectáculos con el ensamble intercultural Theatrum Mundo; el CTLS, Centro de estudios del teatro laboratorio – en colaboración con de la Universidad de Aarhus – el cual organiza el Midsummer Dream School; la Festuge (Semana de fiesta) en Holstebro; el festival trienal Transit dedicado a mujeres que trabajan en teatro; OTA, los archivos vivientes de la memoria del Odín Teatret; WIN, práctica para navegantes interculturales; artistas en residencia; espectáculos para niños, muestras, conciertos, mesas redondas, iniciativas culturales y trabajos comunitarios en Holstebro y alrededores.
Los 56 años del Odín Teatret como laboratorio han favorecido el crecimiento de un ambiente profesional y de estudio caracterizado por la actividad interdisciplinaria y por la colaboración internacional. Un campo de investigación es la ISTA (International School of Theatre Anthropology) la cual desde 1979 se ha transformado en una aldea teatral en donde actores y bailarines de culturas diferentes se encuentran con estudiosos para comparar e indagar los fundamentos técnicos de su presencia escénica. Otro campo de acción es el Theatrum Mundo Ensamble el cual desde 1981 presenta espectáculos con un núcleo de artistas provenientes de diferentes estilos y tradiciones.
Hasta hoy el Odín Teatret ha creado 79 espectáculos que han sido representados en 66 países y contextos sociales diferentes. Durante el transcurso de estas experiencias se ha generado una cultura específica del Odín basada en la diversidad cultural y en la práctica del ‘trueque’: los actores del Odín se presentan a través de su trabajo a una determinada comunidad que los hospeda y esta responde con canciones, músicas y danzas pertenecientes a su cultura local. El trueque es un intercambio de manifestaciones culturales y ofrece no sólo una visión de otras formas de expresión, sino que es también una interacción social que desafía prejuicios, dificultades lingüísticas y divergencias de pensamiento, juicios y comportamiento.
OBRA:
Debido a la crudeza y radicalidad del artesanado que pone en escena, La vida crónica brinda un capítulo visceral a la “leyenda negra” de las creaciones del Odin. Es una obra que abre múltiples líneas que golpean sobre la sensibilidad del espectador: durante una hora se permanece envuelto en una intensidad que se instala nítidamente en el cuerpo. Se atraviesan texturas sonoras y musicales; pasajes del inglés al checheno, el rumano, el danés; el sánscrito, el euskera y el castellano; gospels y canciones de fútbol danesas. La técnica vocal es puesta al límite de una amplia diversidad de matices. Y las situaciones que acontecen no dan demasiado lugar a la reflexión porque avanzan en caudal en el que uno es inevitablemente arrastrado. Un niño busca a su padre y se funde en una constelación inestable, tan brutal como sarcástica. Se trata de un extranjero que anda de paso que, junto a una refugiada, arriba a un territorio donde solo puede permanecer un grupo que vive en la opulencia. El relato de la lucha de Jacob con el ángel enviado por Yahvé, plasmado en el Antiguo Testamento, es un intertexto inspirador de la obra. De allí fue tomada la renguera de todos los “elegidos” que acceden al “espacio-balsa” que domina la escena. Barba señala que el espectáculo contiene una serie de quiebres constantes, signados por lo que Pirandello definió como humorismo. En los ensayos buscaba constantemente esas partículas que den cuenta de la dislocación del terreno dramático por la aplicación de los contrastes: si un ama de casa intenta suicidarse asfixiándose con una bolsa de nylon, lo hace mostrando sensualmente sus muslos. Fragmentos que se entretejen en la eficaz simultaneidad de las líneas de acción que se entrecruzan en el espacio donde conviven tanto el burócrata danés, los mantras de la virgen negra, como las potentes plegarias de la viuda Donna Vera o el llanto de una refugiada chechena que manipula un mazo de cartas con imágenes de sus seres queridos. Aunque se ofrece como información una locación temporal de futuro, la ácida y corrosiva digestión en la que discurre la condición humana en el espectáculo, no resulta para nada lejana del mundo contemporáneo. La vida crónica está más lejos de lo profético, que de la carne que tensa las luces y miserias de lo cotidiano.
REPARTO
Kai Bredholt, Roberta Carreri , Jan Ferslev , Elena Floris , Donald Kitt , Tage Larsen
Sofia Monsalve, Iben Nagel Rasmussen¡, Fausto Pro, Julia Varley.